Talento
Palabras para la entrega del Premio Fuencisla García Nieto – 15 junio 2016 Colegio Champagnat de Salamanca
En primer lugar quería dar las gracias a los organizadores, el AMPA del Colegio Champagnat y al propio colegio, por invitarme a esta entrega de premios literarios que es también un momento de fiesta, una ocasión para encontrarse y celebrar juntos que todos somos capaces de inventar, de disfrutar leyendo nuevas historias y de reconocer el trabajo y el talento de los demás.
Y del talento, precisamente, es de lo que quería hablar esta tarde, aunque sea muy brevemente.
A menudo pensamos que las personas con talento son algo excepcional. Que el talento solo se da en raras ocasiones. Por supuesto, esto no es cierto. La gente normal estamos llenos de talento. Lo que nos falta, a menudo, es descubrirlo, y atrevernos a disfrutarlo.
Porque, ¿qué es el talento? ¿Es ser un genio? En absoluto. ¿Es poder hacer determinadas cosas bien, sin ningún esfuerzo? ¡Claro que no!
El talento es, más que nada, una posibilidad. Algo que se nos da bien, que nos gusta hacer, para lo que tenemos facilidad. Pero que no se desarrollará a no ser que le dediquemos tiempo, atención, cuidados.
A veces no está claro cuál es nuestro talento, pero eso no significa que no lo tengamos. Solo hay que saber verlo. Para descubrirlo hay que explorar, atreverse a hacer cosas nuevas, por ejemplo, participar en un premio de relatos en el colegio.
También puede ocurrir que no le demos demasiada importancia a nuestras habilidades. Cocinar, contar chistes, jugar al fútbol, pintar, cantar, escribir, resolver problemas matemáticos, o sencillamente tener paciencia y saber escuchar. Podemos pensar que hay otros que lo hacen mejor que nosotros. O quizá tengamos miedo a hacer el ridículo, como si deseásemos algo que está fuera de nuestro alcance. Puede ser, incluso, que creamos que para que valga la pena dedicarle tiempo y esfuerzo debería existir la promesa de que algún día nos haga ricos y famosos. Desde esa perspectiva cualquier cosa que no lleve a este punto se convierte en un fracaso, y ¿por qué arriesgarse a fracasar?
Es la idea de que el talento es limitado. Que solo pueden tenerlo unos pocos para que sea realmente valioso. Que cuanto menos lo posean, más valioso es. Así, es muy común la figura del artista que desprecia sistemáticamente a sus colegas poniendo en duda su autenticidad, su originalidad, su calidad. Los ve como contrincantes en esa exclusividad sobre el verdadero talento. Su mera existencia es una amenaza, mina su confianza, porque ¿hay acaso talento para todos? ¿Es su talento de menor categoría? ¿Tiene el mismo valor si hay otros que igualmente lo dominan? ¿No será él mismo el estafador? Algunos ni siquiera lo intentan, desestiman directamente la posibilidad de explorar tal o cual campo porque ya hay una persona en su entorno que destaca en él.
Es una pena verlo de este modo. A mi entender el talento es infinito. Repitámoslo: el talento es infinito. La posibilidad, la potencialidad, lo es. En su esencia. No importa que lo dominen dos personas en todo el mundo, diez, cien, o mil millones. Nos hará igualmente felices.
Con los cuidados adecuados, ese talento que inicialmente es pequeño puede crecer y convertirse en algo que enriquezca nuestra vida cotidiana, nos dé momentos de alegría, un proyecto en el que avanzar, algo que compartir, experiencias y desafíos nuevos que afrontar. Algo que nos haga más felices y que, de un modo directo o indirecto, también haga felices a quienes tenemos a nuestro alrededor.
Pienso que premios como el Fuencisla García Nieto, abiertos, participativos, amplios en su reconocimiento, buscan precisamente eso. Fijar su atención sobre todos nosotros, alentarnos a descubrir que podemos disfrutar escribiendo, recordarnos que es emocionante probar a hacer cosas distintas, que tenemos que mirar a nuestro alrededor con confianza y lanzarnos a participar en el mundo de la manera más activa y creativa posible. Y es que descubrir y apoyar el talento de los demás, ya sean alumnos, hijos, amigos, parejas o simples conocidos, es uno de los talentos más bonitos que hay.
Muchas gracias por invitarme a compartir este día con vosotros y felicidades a los premiados y a todos los participantes.