Entrevista de los lectores sobre El secreto del huevo azul
Desde el blog Mis Trucos Para Educar, de Laura Monge, propusieron hace algún tiempo leer en familia, a la hora del cuento, “El secreto del huevo azul”. Tras la lectura, de la que Laura me fue contando anécdotas y buenos momentos, llegaron las preguntas de los jóvenes lectores y entre todos armamos una estupenda entrevista. Aquí tenéis un aperitivo, y el resto en Taller de Literatura Infantil: El secreto del huevo azul (III)
“- ¿Te costó hacer el libro? ¿Cuánto tiempo?
Lo de los libros es algo curioso. Algunas historias se escriben muy rápido y otras avanzan muy lentamente. El secreto de huevo azul fue la primera historia realmente larga que escribí, así que tuve que aprender muchas cosas mientras lo hacía. Escribí una versión, y luego otra, hice muchos cambios, me quedé atascada, sin saber por dónde seguir, encontré el camino y finalmente pensé que estaba terminada. Me sentí muy bien y estaba muy contenta con mi novela. Había trabajando en ella durante varios meses. Luego traté de publicarla pero a nadie le interesó. Así que la guardé en un cajón y me puse a trabajar en otras historias. ¡Había descubierto que me encantaba escribir novelas, incluso aunque nadie las quisiera! Unos años después, y esto lo he contado otras veces, una de mis hermanas me preguntó por El secreto del huevo azul, a ella le encantaba esta historia y quería que yo hiciese algo con ella, ” ahora que ya sabes más trabaja en ella hasta que esté bien”, me dijo. Y eso es lo que hice. Tardé varias semanas en volver a escribirla, puede que un par de meses (no soy muy rápida), y luego la envié al Premio Barco de Vapor, donde resultó elegida.
Así que, ¿cuánto tardé en escribir El secreto del huevo azul? Pues no tengo ni idea. Lo importante es que con este libro descubrí que me encantaba todo el proceso de escribir, no solo tener la idea, sino también reescribir, corregir, cambiar, mejorar, insistir…
– Es curioso, pero varios niños preguntan lo que viene a continuación: ¿Eres guapa?, ¿de qué color tienes el pelo? ¿y los ojos? ¿Cuántos años tienes?
Humm… La primera pregunta es la más difícil. Soy normal de guapa. Una vez leí en una novela una frase que me impresionó. El protagonista describía a su madre, a la que quería mucho, diciendo de ella que era “regiamente fea”. “Regiamente” quiere decir majestuosamente, como una reina. Esa frase me hizo pensar mucho. Venía a decir que esa mujer podía ser fea, incluso muy fea, y sin embargo tenía un carácter, una personalidad, que sin duda era lo suficientemente interesante, y fuerte, como para que aunque no fuese hermosa resultase muy especial. A veces, cuando no me siento muy guapa, ¡porque eso va a días!, pienso en esa frase y en esa mujer de la historia, y me digo que también puedo ser “regiamente fea” sin que se acabe el mundo.
Tengo el pelo y los ojos castaños, no soy especialmente alta y sí un poco regordeta (regiamente regordeta, si os parece). A veces utilizo las gafas para ver de lejos, pero también me gusta ir sin ellas, según el día. Me encanta saber cómo vestía antes la gente, visitar museos de moda con trajes antiguos y ver películas con un vestuario bonito, pero soy perezosa para vestirme y suelo llevar ropa sencilla y cómoda. No sé andar con tacones, en mi bolso siempre hay bolígrafos, alguna libreta y probablemente un libro, y me gusta la gente que prueba a ponerse ropa alegre y extravagante, distinta a la que solemos llevar los demás.”
No os perdáis la entrevista completa, ¡hay muchas preguntas sorprendentes!